26 de julio de 2021
Amigos, saludos desde el campo base. Estoy muy contento también cansado, pero con una gran satisfacción por haber alcanzado la cumbre de ésta gran montaña. Es una montaña que no es nada fácil, con muchas complicaciones del clima. Al comienzo muy cargada de nieve, con muchas coladas, avalanchas y desprendimientos de seracs y con una meteorología nada favorable que nos tuvo 15 días de espera en campo base y pidiendo a los cielos para que las condiciones cambien.
Gracias a que cuento con un gran especialista en meteo pudimos saber que la ventana de buen tiempo venía y con esto tener más confianza para empezar el ascenso.
Salí juntos a mi amigo Carlos Pauner y otros 3 españoles que nos hicimos amigos acá desde campo base avanzado por un camino larguísimo de piedras, luego una travesía enorme hasta el campo 2.
Subiendo por las pendientes del Lenin
Al siguiente día, salimos hacia campo 3. El ascenso es muy parecido al camino a la cumbre del Chimborazo, con una parte muy pronunciada, muy grande que llega a 6150 m. Pasamos otra noche más a la expectativa. Es realmente cansado tener que llegar a cocinar, derretir nieve para hidratarte después de largas jornadas como ésta.
Finalmente, al otro día llegó el ataque a la cumbre, el 25 de julio tan esperado por todos. Salimos a las 3 am nuevamente junto a mis amigos españoles. Primero por una bajada de aproximadamente 100 m de desnivel y luego venía la bueno, una loma gigantesca que llega a 6450 m. Después comienza la arista de la montaña que parece interminable, varias veces parecía que ya llegaba a la cumbre y no, volvía a aparecer más y más camino.
Rumbo al ascenso
Cuando dieron las 7 am empecé a sentir mucho frío porque iba a un ritmo donde tenía que esperarlos a ellos, pero ya no aguanté más y tuve que adelantarme del grupo y llegué sin ellos a las 11 am a la cumbre. Fue muy emocionante. Allí estaban unas personas que habían salido más temprano y un chico de Irán tuvo un gesto muy lindo, me regaló parte de su liquido vital, gaseosa y agua. Yo llegué muy cansado y ya casi sin agua. Así que él gesto de él fue tan bonito porque estos valores como el compartir, la solidaridad me parece que es muy valioso que se recupere porque en las montañas se estaba olvidando esto, las personas lo estaban convirtiendo en una carrera, una competencia de logros sin pensar en los demás.
Subiendo a la cima a menos 30 bajo cero
Ese gesto de él me ayudó a mí a recuperar mis energías y lo valoro muchísimo. Cuando llegué dejó de soplar el viento porque durante casi todo el camino tuvimos fuertes golpes de viento. La montaña es un ser, muy sagrado, por cierto. Así que para llegar a su cumbre hay que hacer un gran esfuerzo.
Para mí, esta montaña es tan dura casi como subir un ocho mil de los mas bajos. Pero es una montaña que aprieta, que pone a prueba tus fuerzas y experiencia.
La bajada es de mucho cuidado porque se baja por roca desmenuzada como ripio y no hay como cometer errores ni caerse. Una bajada que fue muy exigente, donde se necesita mucha fuerza en las piernas, mucha concentración, mucha paciencia y eso te desgasta físicamente. Ahora me duele la espalda.
Cresta final del Pico Lenin
Finalmente llegué a campo base, deshidratado, seco y cansado. Y con el corazón alegre. Totalmente agradecido por esta experiencia, por esta hermosa cumbre.
Agradezco a mis patrocinadores Saludsa Vitality y BGR del Ecuador que creen en este proyecto.
Lo he dado todo de mí. Me voy de sus laderas contento. Tuve la bendición de poder compartir esta montaña con Carlos y mis nuevos amigos que se portaron super bien conmigo. Los días en campo base con ellos fueron más llevaderos, jugábamos cartas, compartíamos experiencias de la vida y la montaña, intercambiábamos alimentos que cada uno traía, nos apoyamos en la subida y la bajada y todo esto fue muy bonito y especial. No es lo mismo que estar solo.
Este es un gran resumen de lo que fue esta expedición y ahora el segundo paso es regresar a la ciudad y tomar la decisión hacia cuál montaña seguir. Hay varios factores que debo analizar como las visas, la situación de pandemia en Tajikistán, vuelos de helicópteros, etc. La otra opción sería seguir en Kirguistán y hacer otra más acá. El tiempo que tengo de temporada ahora es más corto así que tengo que pensarlo muy bien.
Cumbre Pico Lenin
Ya les contaré. Muchas gracias por todos sus comentarios que me hacen en las redes y los que me envían por la web. Su cariño lo valoro mucho, gracias.
Un abrazo a todos,
Santiago Quintero
